¿Por qué Murió Jesús?    En el libro escrito por Marcos hemos visto que Jesús es el Hijo de Dios y el Siervo perfecto que siempre hizo la voluntad de Dios.   Vino del cielo a la tierra para dar a conocer el amor de Dios.   Dios ama a todos los hom- bres y por eso Jesús anduvo ayudando a la gente y sanando a los enfer- mos.   Podía dar vida a los muertos y alimentar a los que tenían hambre. Enseñaba a los hombres la verdad acerca de Dios.   Les enseñó que sus pecados podían ser perdonados y que podrían ir al cielo.    Muchos le llegaron a amar pero los líderes orgullosos le aborrecían.   Le tendieron trampas para poder darle muerte.   Pilato, el gobernador, lo quería soltar pero el pueblo pidió que lo crucificara.   Se burlaron de Cristo y lo insultaron.    ¿Por qué permitió Dios que los hombres hicieran esto con su Hijo?   No fué porque hubiera pecado en él ya que Jesús fué perfecto.   Después de ser crucificado Cristo clamó: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?"   ¿Por qué se apartó Dios de su Hijo en la hora de su mayor necesidad?    La respuesta a estas preguntas es que Cristo murió por nuestros pecados.   ¿Qué es pecado?   Al principio de la Biblia leemos que nuestros primeros padres desobedecieron a Dios.   Dios les prohibió que comieran el fruto de un árbol, pero lo hicieron.   Eso fué pecado.   Dios dijo que ten- drían que morir a causa de ese pecado.    Dios nos ha creado a nosotros también.   Tiene el dercho de darnos órdenes.   En la Biblia nos dice lo que debemos hacer y si no le obedecemos estamos pecando.   Todos los hombres han pecado y están condenados a morir.    Pero Dios nos ama y quiere darnos vida, así que envió a su Hijo a morir en nuestro lugar.   Jesús nunca pecó y no era necesario que él muriera.   Ya que es Hijo de Dios su vida vale más que la de muchos hom- bres y por eso, por su muerte, Dios puede perdonar a muchos.    Todo lo necesario para nuestra salvación fué hecho por Cristo.   No es necesario para nosotros hacer mas que creer y aceptar.   Pagar dinero o ser bautizados no nos consigue la salvación.   Dios da la vida eterna a todos los que se someten a él y creen que Cristo murió por ellos. 15